Precios de la energía en alza vs niveles bajo de reservas

Altas y preocupantes expectativas reflejan los mercados en Europa estos últimos días por la escalada de los precios de la energía y que ha puesto a sonar las alarmas mas cuando la producción no refleja los números necesarios ya casi con la llegada del invierno.

Con el temor de una posible crisis energética global los operadores manifiestan que los países inician una fuerte carrera por almacenar materia prima energética para poder cumplir las demandas de los próximos meses.

Los precios de la luz, gas, petróleo siguen con tendencia al alza y a esta lista se ha sumado recientemente en Europa el consumo del carbón como generador de energía reflejando este ultimo año unos valores de hasta 210 la tonelada métrica.

Uno de los factores que ha impulsado el alza de los precios del carbón, según la opinión de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), está en el hecho de que la industria china haya reducido su consumo de carbón en el marco de la lucha contra el cambio climático, debido a la cercanía de los Juegos Olímpicos de Invierno a partir del próximo 4 de febrero en Pekín. Su industria se ha visto obligada a ser muy dependiente de la producción de gas, sometida a  fuertes tensiones por razones geoestratégicas.

Gas: el eterno protagonista del mercado

El mercado asegura que existe una gran incertidumbre por la capacidad de suministro de Nord Stream 2, (el  sistema offshore de gas natural de Europa que se ejecuta bajo el mar Báltico entre Rusia y Alemania) y parten de la idea que Rusia estaría presionando al regulador reduciendo las exportaciones de gas para que acelere los permisos administrativos.

Cabe destacar que estos últimos años la industria no ha invertido lo suficiente para atender los incrementos de demanda tras el levantamiento de las restricciones por el covid, lo que ha impulsado la economía y ha influido de una manera determinante en el bajo nivel de existencias.

Las interrupciones en el suministro de gas han sido frecuentes en los últimos meses, en ocasiones por razones técnicas, por ejemplo, en Noruega, pero también políticas. Rusia, uno de los principales productores del planeta, estaría cumpliendo sus contratos con sus clientes europeos, según la AIE, pero sus exportaciones todavía están por debajo de su nivel de 2019. La Agencia cree que Rusia "podría hacer más para garantizar que el almacenamiento alcance los niveles adecuados para atender la temporada de calefacción invernal".

Para  AGSI+, que recopila toda la información sobre almacenamiento de gas en Europa, señalan que para el año 2020 en esta misma época la existencia de gas se ubicaba en 94.8% de la capacidad total, hoy se alcanza el 73,9%, lo que da idea de las necesidades de suministro ante la llegada del invierno. En el caso de España, el nivel de existencias se sitúa en el 72,8% de la capacidad instalada. Esos registros son muy inferiores a la media de los últimos cinco años.

Argelia, otro de los gigantes del mercado del gas, ha amenazado también con cortar el grifo del gasoducto que pasa por Marruecos con destino a España, lo que explica que el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares acompañado de una delegación representativa del sector, haya anunciado un viaje a Argel para garantizar que no ocurran cortes en el suministro.

Los Precios a pasos agigantados

El mercado reflejo esta última semana precios históricos, como es el caso del barril de crudo del Mar del Norte (159 litros) superó en días pasados los 80 dólares, máximo en tres años, y acumula ya una subida del 50% en el año, mientras que el gas, en el mercado diario de la Bolsa europea de energía, que la integra tanto el mercado spot como el de derivados, ha alcanzado los 76,1 euros el megavatio hora (MWh), lo que supone un 73% de incremento respecto del pasado 15 de agosto. La electricidad en el mercado mayorista ibérico, por su parte, ya ha sobrepasado la barrera psicológica de los 200 euros MWh en determinadas horas del día.

El banco de inversión estima que el petróleo se situará en torno a los 90 dólares a final de año, diez dólares más que lo estimado hace unos meses. Esta revisión explica en parte que sus analistas, al igual que Nomura, Fitch o S&P, hayan recortado cuatro décimas (hasta el 7,8%) sus últimas previsiones sobre el crecimiento en China debido a las restricciones en el consumo de energía por razones medioambientales. China tiene previsto alcanzar el pico de emisiones de gases de efecto invernadero en 2030 y lograr la neutralidad en 2060.

Algunos fondos de cobertura ya registran ganancias de hasta el 40% por su apuesta por las materias primas. Los conocidos super ciclos se producen cuando de forma estructural, no coyuntural, se registra un desajuste entre oferta y demanda, como sucedió a principios de siglo, cuando China, con un crecimiento anual superior al 8%, y tras su ingreso en la OMC, impulsó los precios al necesitar cantidades enormes de hidrocarburos para que funcionara su industria. El petróleo llegó a superar los 135 dólares el barril en 2008.

En conclusión y por los próximos meses la actual crisis ha provocado es robustecer los vínculos entre el precio de la energía y del gas en el marco de la lucha contra el cambio climático.

El gas es una herramienta fundamental para ajustar oferta y demanda en el mercado de la electricidad, ya que es una tecnología de respaldo cuando no existe suficiente cobertura de renovables. En la medida en que avance la transición energética, será menos relevante, pero hoy es esencial para asegurar el abastecimiento.

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